Notable reducción del uso de energía de origen fósil

La eficiencia energética resulta una de las palancas principales que utilizan las fábricas de cemento para mejorar aún más su conducta medioambiental. Esta estrategia llevó a la disminución de un 7% del volumen de combustibles utilizados en 2021 (último ejercicio con cifras disponibles). La noticia todavía es mejor si se tiene en cuenta que el uso de los combustibles más contaminantes (derivados del petróleo y otros combustibles fósiles) todavía se redujo más (-10%).

El camino emprendido por el sector cementero catalán hacia la neutralidad en carbono del sector se refleja en el continuado descenso del consumo de combustibles fósiles, que ha caído un 19% en sólo 2 años, hasta situarse en 7,77 GJ. En cuestiones energéticas, y dada la diversidad de combustibles que se consumen, la medida que se utiliza para homogeneizar las magnitudes es el joule o julio (símbolo J), unidad de energía, cantidad de calor y trabajo en el Sistema Internacional de unidades. Se trata de una unidad derivada que se define como el trabajo que hace una fuerza de un newton cuando el punto donde se aplica se desplaza un metro en la dirección de la fuerza. En realidad, y por razón de los grandes consumos, en las fábricas de cemento se usa el gigajulio (GJ), que corresponde a mil millones de julios.

Nota: Datos en GJ

Fuente: Oficemen