Mercados exteriores

El enorme crecimiento de los costes de la electricidad industrial, una energía de uso intensivo en las fábricas de cemento, repercutió de forma muy negativa en la competitividad de las empresas catalanas en los mercados internacionales. España fue el país con el precio más caro de Europa y las plantas cementeras triplicaron los presupuestos iniciales en consumo eléctrico, lo que produjo un aumento de los costes de producción.

Además, el precio alcanzado por los derechos de emisión de CO₂, que superó los 80 euros por tonelada, contribuyó aún más a la pérdida de competitividad, con el consiguiente efecto negativo en las exportaciones, que se redujeron en 135.000 toneladas. en el año anterior (un 7% menos).

Las exportaciones han sido tradicionalmente una fuente de actividad para las fábricas autóctonas en tiempos de crisis de consumo de los mercados interiores, como ha ocurrido en la última década. Pero la presión en los costes de producción por las causas antes citadas han limitado notablemente esta vía de negocio durante 2021.

Nota: Cifras en toneladas
(*) Datos provisionales
Fuente: Oficemen